Por Mirka Fejova
Toda persona tiene derecho a elegir un lugar para vivir. Tenemos una sola vida y hay que vivir lo mejor que podemos, realmente vivir nuestra vida. No vivir una vida llena de palabras, del tipo “un día voy a ser rico”, “algún día compraré una casa junto al mar”, “algún día aprenderé a bailar”… Sólo tenemos el aquí y ahora. El momento presente es valioso. Ahora tenemos la oportunidad de decidir cómo queremos la vida. Por eso he elegido las Islas Canarias.
No me gusta la gente limitada y demasiado crítica, de mentalidad cerrada y me encanta el mar y la naturaleza. Por eso he elegido Las Palmas. Eslovaquia tiene la naturaleza que podría competir, pero lo que le falta es un clima más estable.
Lo primero que hice fue buscar un apartamento en la capital. Tuve unos problemas insoportables. En Eslovaquia habría alquilado cuatro apartamentos en el tiempo que tardé en encontrar uno aquí. Tengo una pregunta que todavía sigue sin respuesta: ¿Por qué las personas viven en condiciones tan terribles aquí? Los apartamentos normales suelen estar en peores condiciones que los de las personas más desfavorecidas y excluidas socialmente en Eslovaquia.
Mis expectativas de la vida aquí eran grandes y, como siempre, al principio no se ve el lado negativo. En general, puedo decir que todo bien, pero hay grandes diferencias con mis país, y cosas positivas y negativas:
Negativas:
-Aire sucio
-La gente gorda (me dan pena los niños, especialmente): lógicamente se necesitan muchos hospitales por eso.
-Falta de cultura alimentaria:cuando voy a comer fuera, no hay casi nada.
-La vida es cara.
-Mentalidad cerrada, también como en mi país.
Positivas:
-Los conductores respetan los pasos de peatones (en mi país casi nunca lo hacen).
-Paz en la naturaleza, el paisaje hermoso.
-Ingeniería fantástica de las carreteras en la montaňa.
-Pueblos antiguos bien conservados y originales (Tejeda, Guayadeque…)
-Facilidad de acceso a una mayor variedad de frutas y verduras, aunque no están tan frescas como deberían.
-La gente que he encontrado es muy amable y me divierte.
En definitiva, me gusta vivir aquí, somos felices y permaneceremos aquí para vivir, por supuesto.