Voces de Oriente (Relatos de inmersión) #12

Mis estudios universitarios en China estuvieron dedicados a la filología inglesa y trabajé como guía y traductora en el museo de la Ciudad Prohibida de Pekín. El conocimiento del alfabeto latino me favoreció mucho en el aprendizaje de otro idioma como el español.

Mi primer contacto con el español empezó cuando conocí a mi pareja, un canario, en Pekín, aunque al principio hablábamos en inglés por mi trabajo de aquel momento. Siempre he tenido interés por el estudio de idiomas, a pesar de que el entorno no ayudaba mucho al aprendizaje, pero, como dice un refrán chino, “el gusto es el mejor maestro”.

Mi primer acercamiento al español fue en el Instituto Cervantes en Pekín, durante un mes de curso intensivo. Tengo muchos recuerdos de mi primera profesora, su forma de enseñar era dinámica y activa, utilizaba los cinco sentidos para ayudarnos a captar el feeling con el español. Aun así, el tiempo era demasiado corto para llegar a un nivel mínimo de comunicación, sentí la dificultad de la conjugación de los verbos y el ritmo de hablar era inalcanzable.

Cuando llegué a España solo sabía saludar y despedirme. El inglés me ayudó mucho para no quedarme fuera de todo, pero la sensación de no entender nada del entorno era horrible. Empecé a estudiar sistemáticamente en una academia privada enfrente de mi casa con las dos únicas profesoras de la escuela que nos enseñaban un día vocabulario y otro día gramática. En casa dedicaba todo mi tiempo libre a estudiar, escuchar noticias, ver las películas con subtítulos en inglés, leer y hablar con los amigos, lo que podía. Era un principio de inmersión en el español y mis oídos se han abierto totalmente desde entonces. Después de medio año entré en la EOI con un nivel de B1, allí empezó un camino no tan fácil como al principio.

Otra etapa significativa en mi proceso del aprendizaje fueron los años en los que estudiaba la carrera de Estudios de Asia y África en la Universidad Autónoma de Madrid; agradezco inmensamente esos cuatro años de formación, que no solo mejoraron mi nivel de español sino que también ampliaron mis conocimientos, mi visión de Occidente y mi profesión como profesora de chino.

Creo que ya no tengo tantos obstáculos con el castellano, ni en la vida cotidiana, ni en el trabajo. El desafío actual lo tengo en la producción escrita, no hay atajos en este camino salvo la práctica, escribiendo. Mi objetivo es conseguir un buen nivel en la escritura y conocer mejor la gramática española y su uso. Sé que no podré tener el nivel de un nativo, pero mi compromiso con la educación me obliga a tener un nivel alto en todos los aspectos.

Voces de Oriente (Relatos de inmersión) #11

Me llamo Yi. Soy de China, soy ama de casa. Hablo chino, coreano, inglés y ahora también un poco de español.
Al principio cuando tuve mi primer contacto con español, me sentía curiosa y emocionada. En mi caso, yo sé inglés, y las letras de español son iguales a las de inglés, aunque suenan muy diferente. Por eso no me sentía tan extraño sobre español, pero ya hace muchos años que estudié inglés y estaba un poco aburrida con ello y el español como un idioma nuevo me dio mucha curiosidad de aprenderlo.
Después de casarme con mi marido, decidimos regresar a su país, España, pero antes yo no sabía nada de español y para vivir por aquí tenía que aprender la lengua sobre todo.
Como un comienzo de un idioma totalmente nuevo,pensé que era mejor estudiar en la clase con el profesor que en casa sola. Por eso fui a una escuela del idioma español para empezar. Y aprendí el alfabeto ahí en la escuela. Como lo he dicho, yo sé inglés y las letras son iguales, por eso no tenía mucha dificultad para conocerlas.
Yo estudié en esa escuela hace cuatro meses cuando estaba embarazada, desde el nivel A1 a la B2. Cada mes por un nivel, pero era demasiado rápido para mí. Y después de nacer mi niño no pude ir a la escuela, estudié sola en casa cuando tenía tiempo hace dos años. Pero la clase ahí me ayudó mucho para conocer el sistema de la gramática de español y me hizo más fácil y clara cuando estudié sola. Y en este período cuando estudié en casa principalmente utilicé internet para aprender. Vi las series españolas en Netflix, los cursos de español en You Tube, y tomé notas de las frases que me interesaron. Con todo esto me ayudó conocer como se hablan los españoles en su vida real, al menos más real que lo en el libro. Pero aunque ya tomé muchas notas pero no me salía nada cuando hablé con la gente. A esa hora me di cuenta que el lenguaje siempre es para comunicar y yo justo faltó mucho a eso. La verdad es mi marido es español pero nunca habla español conmigo. Nació aquí, pero su original país es Corea, solo hablamos coreano y no me ayudó nada.
Afortunadamente luego yo conocí a una amiga española muy simpática y quedamos una o dos veces a la semana por hablar español. Al principio me sentía muy vergonzosa de hablar con ella, pero ella siempre fue paciente, me animó a hablar, me corrigió y también me enseñó las expresiones más locales, poco a poco me fui a acostumbrar hablar español. Por supuesto mi español no es tan bueno todavía, pero al menos no me da miedo ya cuando hablo con la gente.
Ahora volví a la clase de nuestra Escuela y estoy en el nivel A2.
Para mí, creo que tengo dos barreras del idioma. Una es carece de vocabulario. En mi opinión, el vocabulario es más importante que la gramática. La gente puede hacer comunicación, solo con las palabras, sin gramática (Claro que sí, hablan más perfecto con gramática correcta). Ahora todavía no sé las palabras, incluso las básicas suficientemente, por eso a veces no entiendo bien y tampoco no me expreso bien si no sepa la palabra. Y otra barrera es la dificultad de escuchar. Ya puedo hacer las preguntas si tengo alguna duda o curiosidad, pero el problema es la gente española es muy simpática y siempre me explica mucho, también habla muy rápido y no puedo entender bien. Por eso ahora para mí es más difícil entenderse a la gente que expresarme a mí mismo.
Por ahora creo que ya puedo hacer bastantes cosas. Puedo hacer compras en la tienda, puedo llevar a mi niño al hospital, puedo quejarme al regente, puedo hablar con la profesora del cole sobre mi niño y otra mucha cosa.
Pero la verdad es puedo puedo hacer mucha cosa pero no puedo hacerla perfecto. Cuando fui a la farmacia para comprar una crema, no entendí bien que la dependiente me recomendó, solo pude comprar la crema que estaba usando siempre. Cuando llevé a mi niño al centro de salud, solo puede saber se cogió la otitis otra vez y necesitó tomar antibiótico, pero no pude consultar bien con su pediatra como por qué se cogió la otitis tan a menudo, cómo prevenirla…, porque no conocí mucho las palabras médicas, no entendí su explicación bien y la pediatra no tenía tanta paciencia porque hay más pacientes que estaban esperando afuera. Todas las cosas como así me dan depresión, pero también empujarme a aprender.
Me gustaría vivir aquí sin dificultad de lenguaje como vivía en mi propio país China. No es decir que querría hacer la tesis como los universitarios, al menos querría hablar o hacer alguna cosa libremente en mi vida diaria sin ayuda. y para eso creo que debería alcanzar el nivel B2.
Ya llevo casi tres años viviendo aquí. Antes no sabía nada de español. empecé a estudiar desde que llegué aquí y la mayoría de tiempo estaba estudiando sola. Ahora empecé la clase de español de nuevo con la profesora Belén y los compañeros. Estoy segura que con más esfuerzo puedo hablar mejor español y alcanzar mi objetivo temprano.

Voces de Oriente (Relatos de inmersión) #10

Mi contacto con el mundo español comenzó hace cinco años cuando conocí a mi marido canario en Taipéi. Para mí, aprender cosas nuevas, como aprender el idioma y cultura española, ha sido muy ilusionante. Como hemos aprendido inglés en la escuela, fue fácil de comenzar el aprendizaje de español.

Mis primeras herramientas fueron los cursos gratuitos en Internet y las telenovelas sudamericanas. Por otro lado, si no hubiera tenido tanta ayuda de mi marido, tendría un progreso muy limitado. Empecé a estudiar en EOI un año después y me ha motivado bastante tanto el curso por si mismo como tener los compañeros. Dedico unas 4 horas a la semana haciendo tareas y repasando las clases. No soy muy de lectura ni muy trabajadora, aun así, he avanzado bastante mi nivel solo por cumplir los requisitos del curso.

Ahora puedo comunicarme en las tiendas y ayuntamiento sin mucho obstáculo. Pero, muchas veces me he encontrado frustrada por falta de los léxicos específicos y de las formas de habla para expresarme con un poco de cultura. Hablar por teléfono sigue siendo un desafío. Hace tiempo tenia una barrera que me impedía avanzar. Aunque puedo entender lo que dice la gente y los diferentes programas en la tele y el sentido del humor, aún me cuesta expresar mis ideas y decir cosas con claridad. Lo mismo pasó con mi aprendizaje del inglés.

Cuando empecé el curso C1 tuve una pequeña crisis, puede ser un choque cultural. Es que no me gustaba la parte de hablar y opinar en las clases anteriores, y ahora esto es lo que hacemos principalmente en C1. Mi educación en Taiwan fue limitada en escuchar a los profesores y memorizar los textos. Creo que nuestra educación en Taiwan nos ha limitado la libertad de pensar y opinar y me falta la competencia para organizar mis pensamientos y compartir con los demás. Por lo tanto, sería necesario participar en actividades que no suelo hacer como las que hacen en la clase de C1. En fin, quisiera establecer una vida aquí igual que la que vivía en Taiwan, teniendo un trabajo bien remunerado. Por eso, quisiera hablar como una española con cultura.

Voces de Oriente (Relatos de inmersión) #9

Al principio, muchas gracias a todos los profesores y los trabajadores de la Escuela de Idiomas.

Soy de China, no había entendido nada de español cuando llegué a España. Nunca había tenido eso tan difícil y nervioso en mi vida. Mi amiga me ayudó matricular para empezar aprender español. Como había mucho vocabulario, no entendía nada en la clase, solo busqué vocabulario y memoriarlo; me costaba mucho ese trabajo. Ahora sigo aprendiendo español, aunque tengo mucho vocabulario, y es difícil el oral para mí. Hasta este año he aprendido español más de cinco años. Solo puedo usarlo en la compra, es un poco difícil comunicar con banco, bastante difícil comunicar con el médico. Pienso aprender español hasta la nivel como mi lengua natal y espero que llegue la nivel avanzada. Saludos y fuerte abrazo, Bing Yan.

Voces de Oriente (Relatos de inmersión) #8

Me llamo Xiao Qiu, soy de China, de Fuzhou. Cuando vine a España no sabía el abecedario, me fui a matricular a la Escuela de Idiomas. Empecé a aprender el abecedario. Tenía una profesora muy amable y con mucha paciencia que me enseñó.
Ahora puedo hablar un poco de español, todavía me falta mucho para aprender la gramática.
No tengo un buen ambiente para aprender español, porque generalmente no veo la tele en español, ni leo los periódicos y tampoco tengo amigos españoles para conversar a menudo.

Voces de Oriente (Relatos de inmersión) #7

Me llamo Xue Zhen Deng. Soy de Jiangxi, del sur de China. Me gusta el idioma español. Por casualidad escuché el español, sentí que el español era una canción, me gustaba en ese momento.
Luego, compré el libro y la grabación en la librería, empecé a estudiar el español. Lo escuché todos los días, pero el libro fue un libro rápido, solo diálogo. No llevaba alfabeto ni gramática. Estudié mucho tiempo, nunca practiqué y nadie me ayudó, por eso, no había progresado.
Después unos años estudié en la Escuela de Idiomas en Madrid. Me sentí bien, pero pasado unos meses, lo paré porque la gramática era demasiado difícil para mí. Luego compré el libro de gramática. Lo vi en la casa. Cuando lo entendí más, otra vez voy a la Escuela de Idiomas en Guanarteme para estudiarla. Ahora estoy en el curso B1.1, ya he entendido la gramática, pero todavía no la uso bien, qué difícil la gramática.
Actualmente tengo tres problemas muy importantes, son vocabulario, practicar oral y gramática. Necesito trabajar más duro, aumentar vocabulario y practicar oral, también estudiar más tiempo. Deseo poder comunicarme con el español sin problema!

Voces de Oriente (Relatos de inmersión) #6

Mi primera experiencia de aprender la lengua extranjera fue en Inglaterra cuando era pequeña. Mi familia estuvo un año en Cambidge y yo y mi hermana fuimos al colegio público allí. Solo sabía “¿Dónde está el baño? (Where is the toilet?)” en inglés y nada más.

Mis profesoras les dijeron a mis padres que normalmente los niños cuya lengua materna es con el alfabeto tardan unos tres meses en hablar bien inglés, pero en mi caso tardaba más porque tenía que empezar desde cero, es decir, desde aprender el alfabeto. Sin embargo, fue una gran experiencia preciosa porque no solo me dio una oportunidad de hablar bien inglés, sino también de la tolerancia, la flexibilidad y la paciencia enfrente de la lengua nueva, la cultura nueva, aún más, algo nuevo en general.

En Japón generalmente se aprendía inglés de la edad de doce a dieciocho años. Ahora ya implementa inglés en el colegio también, lo que significa que se empieza a aprender inglés a la edad de siete años. En mi caso, por la experiencia de Inglaterra, siempre me gustaba aprender inglés y también las otras lenguas. En la universidad, hice un intercambio en Australia un año y también estudié francés dos años porque me encantaba el ballet.

Cuando tuvimos dos hijos comenzamos a planear nuestra vida familiar y primero empecé a aprender alemán, porque queríamos vivir en Alemania al principio. Luego muchas cosas han cambiado y nos mudamos aquí en septiembre de 2017. Al principio me sentía un poco obsesionada por aprender español tan rápido como podía. Me matriculé en un curso intensivo del español Básico en la EOI y sigo estudiando ahora en el curso B1.2 intensivo.

Hasta que conocí a mi marido, que es medio alemán y medio canario, nunca había pensado que tendría que aprender los dos idiomas. Aunque es un rollo, ahora puedo decir que estoy disfrutando la suerte que tengo.

Supongo que la barrera del idioma hoy para mí es la inercia. Hablo con mis hijos en japonés y mi marido habla con ellos en alemán, así que en casa el español no existe. Sin embargo, poco a poco estoy intentando conocer a los padres del colegio de mis hijos y los vecinos.

Ya puedo hacer cosas cotidianas en español, por ejemplo, hacer las compras, hacer una cita con el dentista por teléfono, hacer una reserva del vuelo online, etc. No puedo hacer todavía papeleo sola, conseguir trabajo, hablar cosas complicadas por teléfono. Me gustaría alcanzar el nivel de conseguir trabajo. Es decir, me gustaría dar una clase de yoga en español, porque soy profesora de yoga. O me gustaría trabajar en educación. Llevo estudiando español desde 2017 y quiero seguir estudiando.

Voces de Oriente (Relatos de inmersión) #5

Me llamo Seolin y soy de Corea del Sur, de la ciudad Busan. Llevo cuatro años aprendiendo español. Conocer el inglés me ha servido de ayuda, porque hay algunas similitudes. Mi marido habla casi perfectamente el español, pero él lo aprendió de manera natural, en contacto con otros españoles durante mucho tiempo. Yo, sin embargo, necesito entender las reglas gramaticales y ahí, él no me puede explicar porqué usa una forma u otra. Los cursos en la EOI me han sido útiles. El alfabeto me resultó fácil. La mayor dificultad que tuve al principio fue con los tiempos verbales. Cuando vi cuántos tiempos verbales había me asusté. En Corea la diferencias temporales se expresan con adverbios o complementos, entonces el sistema verbal es más simple.

Con el tiempo, las formas verbales dejaron de ser mi mayor dificultad. En este momento estoy en el curso B2.2. Ahora lo que más me cuesta son los matices de significado entre los sinónimos o saber exactamente qué acepción de las palabras tengo que usar en cada caso. Otra dificultad para mí son los temas culturales. Yo pasé casi 40 años viviendo en Corea, mi mundo cultural es el coreano y entonces me resulta difícil comprender temas culturales y opinar. Me gustaría tener más conocimientos para entender mejor. También me resulta difícil la comprensión auditiva, para mí es un problema comprender cuando la gente habla muy rápido, con omisiones o localismos. Yo necesito escuchar frases enteras.

Antes le dedicaba una hora y media al día al estudio del español, pero ahora no tengo tanto tiempo. El español me parece una lengua bonita. Lo que me llama la atención es la regularidad de su pronunciación, que, a diferencia del inglés es muy sistemática. El coreano también tiene una pronunciación sistemática.

Uso el español para sobrevivir aquí y para llevar una vida social satisfactoria en la educación de mi hijo. Necesito relacionarme con sus profesores y con la comunidad de padres. Me gustaría alcanzar un nivel que me permitiera comunicarme sin dificultades, entendiendo todo lo que dicen las personas con las que me relaciono y siendo capaz de expresar cualquier cosa sin dificultad.

Voces de Oriente (Relatos de inmersión) #4

Soy Min, de Shanghai. La primera vez que vi una «ñ» en un letrero, pensé que era muy raro, ya que nunca lo había visto. Cuando escuchaba a los españoles hablar antes de entender lo que decían, parecían que estaban hablando una lengua muy difícil de entender. También, no podía aceptar que el jamón estaba crudo y que la carne estaba poco hecha, pero ahora me parece que están muy ricos. Hay mucha diferencia de cultura y de vida, y me parecía haber llegado a un mundo diferente. Pero me pareció que los españoles eran muy entusiastas y amables.

Empecé a estudiar en casa escuchando vídeos y leyendo textos, pero progresaba poco. No conocía el alfabeto y lo aprendí con estos vídeos. Nadie me ayudó en este proceso ni tampoco hablaba en español con otras personas. Los primeros meses solo sabía decir «hola», «adiós» y «gracias». Luego, me fui a la Escuela de Idiomas. Aprendí más de dos años y podía entender al profesor un cincuenta por ciento. Me acordaba de las palabras pero no de la gramática. Después me preparé para quedar embarazada. Necesitaba ir al médico cada mes para hacerme una revisión y tenía que conversar con el médico. Poco a poco aprendí más palabras y a hablar mejor. El año pasado volví a la Escuela de Idiomas. Como ya sabía lo básico, pude entender a la profesora. Aprender nuevas palabras y gramática me resultó más fácil.

Vivir en un país que tiene un idioma diferente que es muy difícil de hablar es muy duro. Puedo vivir normal, pero no puedo explicarme bien ni puedo entender exactamente a otras personas. Algunas veces, incluso puede haber malentendidos. Ahora ya puedo decir las cosas cotidianas para vivir, puedo ir de compras, ir a restaurantes, puedo charlar sobre cosas básicas con mis amigas y puedo llevar a mi hijo a la pediatría para que lo revisen y lo vacunen porque no es muy difícil. No puedo charlar sobre deporte, cotilleo ni política. Tampoco puedo ir al cine porque no puedo entender muchos diálogos ni puedo ir al banco o al hospital porque no puedo entender muchos diálogos profesionales ni sé hablar su terminología técnica. Tampoco puedo sacarme el carné de conducir.

Me gustaría llegar a un nivel de español superior al «B». Dedico de dos a tres horas diarias al estudio del español. Sigo a una persona española que ha trabajado y ha vivido en China siete años, que se llama Guille. Trabaja para la empresa Alibaba. Sube dos vídeos y dos diálogos a la semana en Wechat para enseñar a los chinos a hablar español. Es una App y gasto dinero para comprar su lección de: «Una frase que aprender cada día». Hay miles de chinos que aprenden con él. Su objetivo es enseñar a un millón de chinos. Ya he aprendido con él dos años y es una nueva forma de aprender español.

Voces de Oriente (Relatos de inmersión)#3

Soy chino. Como todo el mundo sabe que aprender una lengua nueva radicalmente diferente que su lengua materna es complicado y difícil para el comienzo.

Antes de venir a España yo no sabía nada de español porque nunca me había sonado por la calle ni colegio, la única idioma que aprendemos en el colegio como la segunda lengua es inglés. Así que es normal que no sepa español.

Yo ya llevo un año y medio aprendiendo español al principio me sentía que fuera facilidad aprender español, especialmente sus pronunciaciones de sus letras se pronuncian como nuestra «Pin Yin». Pero me equipoqué totalmente. La única letra que me da horrible y todavía no sé pronunciar bien es la «R». Intendé a buscar una buena marena de placticar. Aunque sigo buscando, no lo voy a dejar.

Yo creo que tenía mucha suerte porque había un caballero como segunda padre de mi tía me enseñaba español como la primera palabra, cada día me contaba unos vocabulario sobre la vida. Yo he necesitado recordar cada vocabulario que me enseñaba día a día y poco a poco me hacía mucha ilusión aprender español, por ese caballero con paciencia y educado. Unos meses después decidí inscribir en un curso de escuela oficial de idioma, desde aquel día empezó mi pesadilla, todas las mañanas me levanto con pesar mucho y hago lo mismo en la misma hora. Es que me soporta levantarme tan templano. Llegaba todos los días tarde a la clase. Mi querida profesora ya estará costumbrada que llego tarde.

En el futuro sabrá mucho más español y conoceré la gente que sea buena. Y ser independiente.